PORQUE ESCRIBO:

Soy escritor por obligación y escribo para las personas que quieren crear un futuro más humano despertando su espiritualidad. La palabra escrita va dirigida cuando tengo la necesidad de señalar algo que puede ser mejorado en cada ser humano que desea cambiar su vida.
Me han dicho que soy feminista, tal vez lo sea porque provengo de una cultura que da mucha importancia a la mujer. Nosotros, los andinos, somos pacifistas y no queremos hacer de la guerra o violencia un culto. No nos gusta la injusticia. Las mujeres sabias que he conocido han enriquecido mi vida haciéndome ver con su ejemplo el amor, la comprensión, la compasión y la fe en la vida. Finalmente, admiro mucho a las mujeres porque tienen paciencia y mucho amor por los hijos, sus parejas, la humanidad; y ven el futuro con optimismo.

Antes como educador intenté cambiar esta sociedad enferma con discursos dirigidos a los estudiantes; luego comprendí que un libro escrito con lenguaje claro y sencillo tiene más difusión y puede llegar a todo el mundo, causando un gran impacto en las personas, especialmente si va dirigido al despertar de las mujeres.

La mayoría de escritores peruanos se ocupan de temas occidentales; en cambio, somos pocos los que nos ocupamos de difundir la cultura de nuestros antepasados, y los que vemos con sorpresa cómo existen escritores occidentales empeñados a estudiar y a escribir sobre nuestro pasado. Comprendo que ellos son atraídos por nuestra cultura porque buscan cómo curar su sociedad, ya que muchos pensamientos de la cultura andina sirven para mejorar la sociedad donde viven.

Cuando escribo soy consciente que un libro puede cambiar y influenciar en la vida de una persona y sus futuras acciones, porque las palabras penetran más allá de la piel, fijan pensamientos, ideas, y hacerse luego un sentimiento, hasta una experiencia de vida.

Interésados en profundizar el conocimiento de la cultura andina, de los pueblos nativos peruanos, estos libros ofrecen a los lectores innumerables ocasiones de reflexión y descubrimiento. Gracias a algunos editores, muchas personas han tenido la posibilidad de beneficiarse de este trabajo, y mi sueño, la creación de la escuela de la Vida y de la Paz, ha podido hacerse realidad. Desafortunadamente, muchas personas todavia no han podido coger estas ocasiones a causa de la cantidad limitada de idiomas en los cuales los libros han sido traducidos: pero estoy seguro que pronto este conocimiento llegará de alguna manera a la gente que lo está buscando.